Sin metas pero con objetivos, sigo disfrutando de las bicis y de otras actividades. Intento aprender continuamente para mejorar como persona, física y mentalmente. Este blog sigue siendo una especie de diario personal en cuanto a lo ciclístico, pero va siendo hora de ir añadiéndole algunas cosas más que también captan mi atención...

viernes, 21 de octubre de 2011

PROBANDO OTRO SILLÍN


Hoy he salido un ratillo con la bici, más que nada porque tenía que probar de una vez el sillín nuevo que compré el sábado. Bueno, también porque me apetecía rodar un rato con la bici, que esta semana está siendo fructífera en cuanto a aprovechamiento matinal.

El sillín es un SMP, bastante ancho y blandote (perfecto para mis isquiones), y con un gran canal que recorre todo lo largo de éste. Tiene una forma un poco rara, pero de lo que se trata es de que las posaderas vayan lo más cómodas posible. Anda que le he hecho alguna foto...

La primera impresión ha sido buena. Es cómodo, y a pesar de su aparatosidad no dificulta demasiado los movimientos encima de la bici. Y yo tampoco soy de andar “metiéndome” por detrás del sillín en las bajadas chungas (prefiero bajarme de la bici, jajaja).

Lo que siempre noto cuando cambio de sillín, es que la posición de los pies en los pedales parece haber cambiado. Tengo claro que es debido a que el sillín te guía el movimiento de la cadera, con lo que al poner uno nuevo siempre tengo la sensación de ir mal posicionado en los pedales, y además tengo una lilgera molestia en las rodillas.

Con el único sillín que no me ha pasado esto ha sido con el “maldito” Duo-Power, que siempre me pareció comodísimo en ese aspecto. Perfecto para dejar que la cadera se mueva con total libertad. Lástima que sea talla única, y tan duro.

La salida en sí ha sido cortita, en tiempo y en espacio. Más que nada quería rodar un rato, sin forzar los tendones, que últimamente me los he notado bastante fatigados. Así que he usado siempre desarrollos facilones, y he tirado más de cadencia que de fuerza.

El día, feo, de los que no me gustan a mí. Con el cielo tapado, el sol sólo he conseguido verlo un poquito ya llegando a casa. Algo de viento, y ese ambiente fresco y húmedo que me gusta tan poco. Parece que ahora sí ya va a cambiar el tiempo. ¡Jooooo, que poco duró el calorcito!

El recorrido, pasando por Corbera Alta, Can Planes, la zona del camino de Can Casildo, el Cau de la Guineu, las Penyes d’en Rovira, la Font de Sant Ponç, y Sant Ponç, volviendo a casa por dentro del pueblo, subiendo por el campo de fútbol.

Sin grandes dificultades


Total, 19 kilómetros y 500 metros de ascensión, en 1 hora y media. No pretendía hacer nada más.

Se trataba de aprovechar que tenía que probar el sillín para pedalear un rato, romper así el parón de varios días que llevaba sin coger la bici, y disfrutar de la mañana y de la naturaleza antes de irme a trabajar.

Una zona muy bonita en la Riera de Can Planes

Qué pesao...

Me han dado ganas de quedarme toda la mañana haciendo fotos

Mmmm... ¿Paso o no paso?


A lo lejos, La Mola, por encima de la iglesia de Corbera Alta


Tendría que hacer salidas de éstas más a menudo. Menos kilómetros, y más veces por semana. Seguro que me iría mejor para los dolores diversos. Y si además salgo también a correr algún día, mejor.

Tengo 5 semanas de turno de tardes. A ver si cojo una buena dinámica de salidas mañaneras.


Bruno

2 comentarios:

  1. Bueno kumpañ, espero que tengas suerte con el sillín y deje de darte problemas a tus nalgas.
    Ya era hora que refrescara un poquito, que ese calor era insoportable, jejeje...
    Buena rutina llevas, sigue así.

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  2. Parece que no va mal éste que me he pillado. Pero ¿porqué no se los curran un poco más...?
    Bueno, ya tenemos el frío a la vuelta de la esquina, habrá que emigrar a otras latitudes.
    Mientras, intentaré acostumbrarme...

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